Suicidio económico de EuropaInteresante documental de un ruso, explicando cómo están surgiendo como setas empresas rusas que, mediante ingeniería inversa, están replicando todo tipo de piezas industriales y tecnologías para sustituir a los fabricantes europeos afectados por las sanciones. El gobierno ruso, como es lógico, está haciendo la vista gorda con el tema de las patentes.
Comentaba un cliente que la cuota que ganasen estas empresas en el mercado interno no se perdería aún cuando la guerra terminase, pues nadie volvería a confiar sus suministros a empresas europeas y americanas, dada la total inseguridad jurídica.
Pero lo peor no es esto, sino que las nuevas empresas rusas están recibiendo pedidos de países africanos, árabes y asiáticos, que viendo como se las gastan los otánicos, ya no confían en depender de la tecnología occidental para sectores estratégicos. Tienes un problema político y te intentan destruir la economía con sanciones.
Por supuesto, esta desconfianza no sólo afecta a los productores industriales, sino a las entidades financieras, seguros, empresas de transporte y servicios. Y en último término, a la moneda y el sistema de pagos internacionales.
Las estúpidas sanciones no sólo han elevado el precio de todas las materias primas, haciendo que la industria europea pierda competitividad y dispare la inflación, sino que ha perdido a su mejor proveedor y a un cliente con un mercado de 150 millones de personas. Pero sobre todo, la pérdida de confianza y la inseguridad jurídica, supone que muchos cientos de millones de clientes más, en China, en India, en toda América, África y Asia, se piense muy seriamente depender de Occidente para nada.
Cómo bien ha sintetizado Berlusconi: "Las sanciones han aislado a Rusia de Occidente, y han aislado a Occidente del mundo".