N°1. La culpa. Aunque no lo crean tenemos sentimientos.
En especial nos afecta después del acto, pero también puede pasar antes, sobre todo con una mujer a la que le tenemos estima y que quizá sin saberlo se dirige al matadero. Una depresión que dura unos pocos minutos, que como llega fulminante, se va.
Estas líneas lo explican:
"Amor, ven sin carne, de un icor que asombre;
y que yo, a manera de Dios, sea el hombre
que ama y engendra sin sensual placer!".
Zen