«Llamo uñas arriba A cuantos llamo, Y al recibo los hiero Uñas abajo. »Para el que me embiste Pobre y en cueros, Siempre es mi postura Puerta de hierro.»
Hace un par de años, estuve en el pueblo donde nació, una amiga suya y compañera de juegos me contaba, que siempre desde niño contaba chistes, no habia manera que soltara la carcajada, siempre igual de serio.